Empecemos con algunas estadísticas:
- De acuerdo con Cyberstate 2020, Estados Unidos produce alrededor de 65,000 graduados en IT cada año. Sin embargo, tan solo en 2019 en EEUU se abrieron más de 300.000 nuevos puestos en esta industria.
- Estimates sostiene que para el 2025 habrá una escasez de cerca de 4 millones de desarrolladores.
- De acuerdo con el banco mundial, hay aproximadamente 6.5 millones de profesionales IT en Latinoamérica.
- De acuerdo con Stack Overflow, la mayoría son desarrolladores web, y de estos la mitad son full-stack developers. Algunos de los lenguajes de programación más usados por los devs latinoamericanos son Python, JavaScript, HTML y CSS.
La escasez de talento IT se está convirtiendo en uno de los dolores de cabeza más apremiantes de la industria y las Startups de países desarrollados. Las empresas pierden millones de dólares anuales por falta de desarrolladores calificados cuyas tarifas sean pagables, pero esta es solo una de las caras de la moneda.
En la otra cara, miles de compañías y Startups digitales alrededor del mundo están comenzando a confiar en el talento de los devs latinoamericanos, con excelentes resultados y superando por mucho las expectativas.
Sabemos cuáles son los “peros” y los miedos más comunes que hacen que tu empresa aún no se anime a confiar en talento de LATAM (spoiler alert: suelen ser prejuicios infundados), por eso hoy te explicamos las razones puntuales que demuestran que los devs latinos realmente son una excelente apuesta.
3 razones para trabajar con devs latinoamericanos
1.- Sus tarifas son más accesibles porque su costo de vida es más económico
Un desarrollador en Nueva York tiene que pagar aproximadamente $2,000 USD para rentar un departamento diminuto, mientras que un buen piso con Medellín cuesta $500 USD al mes. Un desarrollador en Londres debe pagar más de $5 USD por un viaje en el metro, mientras que uno en México paga el equivalente a $.25. Un café en Australia cuesta $7 USD, mientras que en Argentina se consigue por $2.
Las tarifas de los devs latinoamericanos no son más baratas porque la calidad de su trabajo sea menor, sino porque su costo de vida es hasta 75% más económico que en las grandes ciudades de Estados Unidos, Asia y/o Europa.
Si no tomamos en cuenta el contexto socioeconómico, es fácil dejarnos llevar por la idea de que un dev que cobra $10,000 USD por proyecto es mejor que uno que cobra $4,500, pero al final del día cada uno está cobrando con base en lo que requiere para mantener o incrementar su propio nivel de vida.
2.- El pool de talento disponible es mucho más amplio
Las grandes compañías en las ciudades que son epicentros de la tecnología (como las de Silicon Valley) son ampliamente conocidas por acaparar al mejor talento de la región desde que los desarrolladores estrella se perfilan en la universidad o salen de un bootcamp de programación. Esto deja al resto de las compañías con un pool local muy limitado de candidatos, y por eso han tenido que aprovechar el talento disponible en otras regiones.
Cuando hablamos de “talento disponible” nos estamos refiriendo, específicamente, a desarrolladores cualificados, bilingües, confiables y con experiencia en el trabajo remoto que están listos para comenzar a trabajar en tu proyecto.
No estamos hablando de cantidad sobre calidad, sino de ambas simultáneamente. Si bien también hay mucho talento IT en Asia, los devs latinoamericanos tienen una ventaja extra: su zona horaria coincide con la de Estados Unidos y existe un elevado fit cultural, por lo cual el trabajo asíncrono y en equipo no representan una dificultad extra.
Por cierto: la conectividad en las grandes y pequeñas ciudades de Latinoamérica es muy buena y la velocidad cada vez es mayor gracias a la fibra óptica.
3.- Los devs Latinoamericanos sí están cualificados
Es cierto: la mayoría de los devs latinoamericanos no cuentan con un título de grado de una universidad norteamericana o europea, aunque muchos cuentan con certificaciones y cursos de altísimo nivel en programación por parte de las mejores instituciones del mundo.
La educación universitaria formal es un criterio que cada vez más compañías (incluyendo a Google, Microsoft, Amazon o Hewlett-Packard) están dejando de lado, para priorizar habilidades puntuales que han demostrado ser mucho más valiosas para que se logren los objetivos.
Así que si te preguntas, ¿quién me garantiza que estoy contratando a un colaborador confiable y capacitado?, la respuesta ya no está (en realidad, nunca estuvo) en el diploma universitario, sino en empresas como Workana, que realmente entienden las necesidades actuales de las compañías y hacen el trabajo de curar al talento para que cumpla con todos los requisitos.
¿Cuáles son estos requisitos?
- Que domine el o los lenguajes de programación que necesita tu proyecto
- Que pueda comunicarse de manera fluida en tu idioma
- Que tenga una buena reputación que lo respalde
- Que cuente con las habilidades blandas clave para el trabajo remoto (autogestión, comunicación, trabajo en equipo, etc.)
- Que tenga las herramientas de trabajo adecuadas
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