Recién empezamos un nuevo año y los efectos del Covid continúan sintiéndose en las empresas y startups, que deben planear sus objetivos para 2023 tomando en cuenta un entorno que es más competitivo que nunca, pero que también ofrece oportunidades nunca antes vistas para ahorrar y potenciar la productividad.
El plan de negocios de tu startup es el mapa estratégico que te ayudará a tomar mejores decisiones en un territorio económico y comercial completamente VUCA (Volátil, Incierto, Complejo y Ambiguo), pero que también ofrece algunas certezas:
- La digitalización lo es todo
- Apuntar a stakeholders internacionales ya no es opcional (clientes, talento, inversionistas)
- La flexibilidad y la adaptabilidad son fundamentales para mantenerte competitivo
A grandes rasgos, esto significa invertir más en tecnología, ampliar tus horizontes permanentemente y contar con una estructura de trabajo “líquida”, es decir, que pueda fluir hacia tus objetivos clave en todo momento, aunque estos objetivos vayan cambiando de acuerdo con las condiciones externas.
Todas las startups tienen su propio ADN y objetivos estratégicos únicos, pero hay una serie de pasos que te ayudan a definirlos y alcanzarlos de la mejor manera. Echa un vistazo:
1.- Deshazte de lo que ya no aporta
Si eres una startup o una empresa que comenzó sus operaciones antes de 2019, probablemente construiste tus objetivos generales basándote en un panorama económico y laboral muy distinto en tu industria.
Tomando en cuenta la nueva normalidad, revisa y coteja con tus objetivos prepandemia:
- ¿Qué necesitas acelerar?,
- ¿Dónde tienes que ser más ambicioso?,
- ¿Cómo han cambiado las necesidades y el comportamiento de tu público objetivo?,
- ¿Qué políticas ya no sirven y cuáles hace falta implementar?
Por ejemplo, miles de startups que pasaron de un modelo híbrido a uno remote first, ahora están dando el salto definitivo hacia full remote, algo que hace tan solo un par de años era impensable.
2.- Analiza a tu competencia
Cuando vemos el panorama completo, nos damos cuenta de que “los objetivos de una empresa” nunca existen en el vacío, sino que dependen en gran medida de las necesidades de sus clientes y del comportamiento de la competencia.
Si no tienes la certeza de ser una startup única en tu ramo, entonces debes seguir muy de cerca los pasos de otras compañías como la tuya, sobre todo en lo relativo a:
- Nuevos productos y servicios
- La experiencia de usuario que ofrecen
- Tipo de tecnologías que están utilizando
- La forma en la que ahorran costos operativos
Por ejemplo, quizá tu competencia directa ya invirtió en una plataforma e-commerce para darle un servicio más eficiente y automatizado a sus clientes, y esto no solo significa que están usando tecnología e-commerce B2B, también que ya no tienen que multiplicar ni centralizar la nómina de servicio al cliente a medida que escalan las ventas.
3.- Establece objetivos en equipo y por área
Una vez que tengas un panorama realmente actualizado tanto del entorno comercial como de las estrategias más competitivas, es momento de sentarte con tus líderes de área y tus managers para que te ayuden a aterrizar objetivos concretos, realistas e interrelacionados respectivos a:
- Retornos de inversión
- Expansión de mercado
- Innovación y optimización tecnológica
- Satisfacción de los stakeholders (clientes, colaboradores, proveedores, etc.)
- Responsabilidad social
- Cultura organizacional
- Productividad y metodologías ágiles
- Presencia y autoridad digital
- Escalabilidad y ahorro de costes
- Trabajo remoto y contratación de talento internacional
Todas las anteriores hoy en día son esferas de importancia crítica para cualquier startup y no deben pasarse por alto en la planeación, pero eso no significa que no puedan surgir más de acuerdo con las características de tu negocio.
4.- Determina tus KPI´s y a los responsables de los mismos
Por ejemplo, si has definido que uno de tus objetivos estratégicos será crear una plantilla de colaboradores más flexible y 100% remota para el área de programación o IT, algunos de tus KPI´s clave son la rapidez de las contrataciones, la curva de aprendizaje del onboarding, los costos de reclutamiento, el índice de rotación, etc.
Tener KPI´s claros está muy bien, pero es aún más importante saber quién se está encargando de darles seguimiento y de optimizarlos de manera constante. Por ejemplo, tu líder de recursos humanos puede ser el encargado de reportarte mes con mes cómo la empresa está ahorrando tiempo y dinero con contrataciones remotas IT.
5.- Dale una motivación extra a los encargados de tus KPI´s
La motivación intrínseca es uno de los rasgos más deseables en tus colaboradores, pero nunca está de más darles un pequeño empujón adicional con motivación extrínseca.
Una vez que tengas tu lista definitiva de objetivos y KPI´s para 2023, especifica el tipo de bonos o recompensas que van a obtener tus líderes una vez que se logren, y establece un sistema en el que los avances de cada área puedan ser siempre visibles para todos. En este sentido, la gamificación siempre será tu gran aliada, no tengas miedo en aprovecharla.
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