El 18 de Febrero de 2013 recibí una propuesta en un proyecto de Workana diferente a las que había recibido en todos los otros proyectos. De hecho, nunca más recibí una propuesta como esa.

Estábamos buscando una persona para ayudarnos en el Soporte al Cliente y mi búsqueda ya se notaba era exigente. Esta propuesta demostraba que el profesional realmente deseaba obtener el trabajo, lo transpiraba en cada línea, y eso, como «cliente» me interesó por demás.

Los profesionales vienen a Workana con el objetivo de conseguir trabajos. Los que trabajamos en Workana damos un gran esfuerzo para ayudarlos a obtenerlos, de hecho casi todo nuestro foco está en mejorar la tasa de éxito en proyectos acordados. Pero para que podamos ayudarlos necesitamos que pongan lo mejor de sí.

Somos tres los actores involucrados en cada proyecto: el cliente, el profesional y Workana. Si no ponemos todo nuestro esfuerzo, es muy difícil que tengamos éxito.

Lo más sorprendente de las personas que se ofrecen para proyectos en Workana no es si están capacitados o no. Sino que parecen, en algunos casos, no tener mucha voluntad de ser elegidos.

No imaginan la cantidad de propuestas en las que alguien dice «Yo te lo hago«, $300,00 y punto. En el ejemplo de la foto aquí debajo hay varias cosas que evitan que pueda tomarla en serio. Veamos:

Primero, la propuesta tiene menos de 30 caracteres. El proyecto en cuestión era una página web semi dinámica que tiene una descripción acotada pero que requiere que la persona interesada elabore cómo deseaba desarrollarla. Si me envías una propuesta tan corta no lograrás interesarme.

Segundo, la persona obvió cualquier tipo de regla ortográfica en su oración. Estoy pidiendo por alguien que arme una serie de HTMLs que contienen texto en 3 idiomas. Necesito tener confianza que eres detallista. Escribir de esa manera no va ayudarte a obtener el proyecto. La mayoría de los clientes eliminarán propuestas como ésta.

Recuerda que hasta que eres elegido hay otros profesionales compitiendo por trabajar en el proyecto, debes hacer la mejor propuesta. El precio es solo un factor en ello.

La sutil-enorme diferencia entre «Me gustaría» y «Lo quiero con todo»

¿Por qué enviar una propuesta si no vas a ponerle todo tu esfuerzo en intentar ganarte al cliente?

Una forma de ayudarnos a enviar mejores propuestas es hacerlo escuchando I Want it All de Queen mientras las escribimos 🙂

Cada vez que publico un proyecto en Workana me pregunto por qué algunas propuestas no tienen casi esfuerzo en su elaboración. Entiendo que enviar propuestas es una parte tediosa y frustrante. Siempre, conseguir clientes, sea en Workana o fuera, es complejo.

Nosotros trabajamos para facilitar el encuentro entre ustedes. Buscamos potenciales clientes interesados en conseguir profesionales capacitados, pero gran parte del éxito depende del interés demostrado cuando se envían las propuestas.

Respecto a la frustración de generar propuestas, es algo que medimos en Workana. Sabemos que en promedio un profesional debe enviar entre 10 y 12 propuestas para conseguir un proyecto. Claro que esto cambia según otros aspectos, pero ese es el promedio general. Lo llamamos «Ratio de frustración» porque queremos ser conscientes de lo que genera cuando ese número crece.

Enviar propuestas es un trabajo duro, pero es aún peor si no le pones todo de ti mismo. Incluso es preferible enviar menos propuestas pero completas y personalizadas, que enviar muchísimas pero todas cortas y sin pensar.

Cuando envías una propuesta tu primer objetivo debe ser lograr el suficiente interés del cliente como para empezar una conversación. Una vez que puedas conversar con él ya solo debes hacer las preguntas correctas para entender qué es lo que requiere y si podrían trabajar juntos.

Por último debes cerrar con una propuesta final e convencerlo a que acepte tu propuesta. No tengas miedo a pedirle que se apure. Decirle cosas como «Necesito saber cuándo va a comenzar el proyecto porque estoy con otros compromisos pendientes aguardando tu confirmación» es muy aceptable.

Si realmente quieres hacer un proyecto debes demostrarlo desde tu primer propuesta/mensaje hasta completarlo y entregarlo.

La mejor propuesta

El proyecto fue este: «Soporte al cliente para Workana«. Y la propuesta se las voy a citar palmo a palmo. Nótese que tengo un método algo extraño para asegurarme que los interesados leen toda la descripción de mis proyectos. Les pido que escriban una frase al principio de su propuesta, en este caso era «Soy un Atreides«. Aquí sigue:

Soy un Atreides
Hola Guille! cómo estás?
Me encantaría encarar esta propuesta de laburo, por mi parte sé que es algo que me gusta hacer, algo en lo que tengo experiencia, sobretodo en la respuesta y el feedback con los clientes. Customer care siempre fue mi fuerte, podés ver que tengo buena comunicación con mis clientes y siempre lo hice a través de los trabajos que he realizado (tanto aquí como en relación de dependencia).
Soy detallista, observadora, suelo ser muy buena traduciendo los requerimientos de las personas, hasta los que no lo expresan, mi lado de terapeuta sale y pregunto induciendo a que las propuestas sean más claras. Me sale a veces hoy en día leyendo proyectos, veo muchas veces que les propondría a los clientes que reformulen lo que piden para recibir mejores propuestas.
Buscar soluciones por mi cuenta, casi mi cotidiano, soy una investigadora y aprendo cosas nuevas todos los días, nunca me quedo sentada a esperar, muevo, siempre muevo hacia adelante.
Hablo inglés, a nivel nativo (trabajé en customer care de Nextel para USA en algún tiempo de mi vida), no hablo portugués pero entiendo al leer.
Creo en este proyecto que armaron, Workana abrió puertas a muchos, a mi sin dudas, creo que es un espacio libre para poder buscar y encontrar lo que cada uno necesita, de acuerdo al precio que puede pagar, de acuerdo al precio que se quiera cobrar, con una reputación para cada uno que lo ubica en la comunidad para saber como trabaja, realmente siento que Workana me da libertad y seguridad, parece que te quiero comprar con el comentario, la verdad que no, es lo que se transmite. Me pasó hace un par de días, un cliente me invitó a un proyecto y me pidió «asesoramiento» de qué necesitaba yo para trabajar y de los pasos a seguir en Workana y hemos intercambiado varios mensajes.
Estoy online a diario, mantengo canales de comunicación abiertos, no tengo un trabajo fijo, este se convirtió en mi trabajo fijo/móvil. Mis respuestas son rápidas, hasta cuando aún no tengo la respuesta, cuento por donde ando, quito la posibilidad de conjeturar y que la falta de respuesta se traduzca en «no estar haciendo nada» frente a lo pedido.
Realmente, me encantaría trabajar con Uds.
Quedo a su disposición para lo que necesiten.
Saludos!!
Nati

Creo que queda claro por qué esta propuesta saltó a mis ojos. Fue el primer paso para querer entrevistar a Nati. Hoy trabaja con nosotros a tiempo completo y fue obteniendo cada vez más responsabilidades y oportunidades con el crecimiento de Workana. Es un ejemplo para todos los que formamos Workana y mirando hacia atrás todo eso se puede ver en la propuesta que me mandó ese 18 de Febrero.

¿Y vos? Si hay un proyecto o trabajo en el que te interesa trabajar, ¿por qué no pondrías todo para obtenerlo? Aqui puedes ver todos los proyectos disponibles.