Una de mis principales preocupaciones cuando he decidido cambiar de ciudad fue descubrir si había posibilidades interesantes para realizar mi trabajo remoto.
Como freelancer en Workana hace 3 años, ya estaba más que acostumbrada a lidiar con el trabajo freelance donde vivía… pero ahora necesitaba encontrar lugares acogedores y con buen soporte para seguir trabajando.
Me he mudado a Jundiaí, municipio en el interior de São Paulo, que cuenta con más de 300.000 habitantes y buenos niveles para vivir con relación a la seguridad y educación. Pero no sólo eso:
Ya en las primeras semanas he descubierto que conseguiría encontrar fácilmente algunos lugares en los que mi trabajo freela podría seguir siendo independiente; pero no necesariamente aislado.
El SESC de la ciudad cuenta con una biblioteca óptima, con acceso a un Wi-Fi de calidad. La Biblioteca Municipal Nelson Foot también, inaugurada en la década de los 70, pero que ocupa un espacio amplio, moderno y tecnológico lo suficiente para el trabajo de creación de contenido.
En poco tiempo me he acostumbrado al nuevo clima y a las opciones de la ciudad. Hay también buenas cafeterías y librerías que ayudan a encontrar inspiración cuando surge algún bloqueo. Y, además, la ciudad tiene una buena red municipal de internet, en la que es posible conectarse y trabajar en diversos puntos públicos de la ciudad.
Brasil (y el trabajo freela)
Pero Jundiaí no es la única ciudad en Brasil que yo recomendaría. Es más, la actividad remota en Brasil ha crecido tanto en los últimos años que ya abarca el tercer lugar en el mundo en lo que se trata de trabajo freelance – perdiendo sólo para Colombia y para Grecia.
Según Guillermo Bracciaforte, cofundador de Workana, son más de 1,3 millones de personas que representan el 32,9% de la fuerza de trabajo remoto nacional.
Estamos hablando, por lo tanto, de un país que no sólo tiene una óptima receptividad a los inmigrantes, es culturalmente diverso y amplio; pero también una nación que ha adoptado definitivamente el trabajo freela como opción de trabajo. Sólo en 2017 la actividad ha crecido 80%!
Con ello, ciudades como Porto Alegre, Río de Janeiro, São Paulo, Santos, Vitória y Curitiba han pasado a ofrecer aún más lugares para el trabajo remoto. Son ciudades con alto número de cafeterías, librerías y espacios con internet a disposición, en los cuales tú puedes llevar tu trabajo fuera de casa un poquito.
Es por eso que considero a Brasil el número 1 en nuestra lista de opciones mundo afuera.
Pero mientras estés de viaje, hagas un cambio definitivo o simplemente pensando en respirar nuevos aires para dar un tiempo al home office, otras opciones valen mucho la pena para quien es freelancer. Mira:
Lisboa, Portugal
La capital portuguesa ofrece buenas opciones para aquellos que trabajan freelance. Gran parte de las bibliotecas de Lisboa tienen wi-fi y mesas para estudio e investigación. La más reciente de ellas, Biblioteca de Marvila, cuenta con un espacio amplio y bien moderno.
Además de las varias bibliotecas con conexión Wi-Fi gratuito, la ciudad también cuenta con el espacio NowCoWork de Lisboa, que permite que los profesionales usen las mesas y espacios de forma flexible. Es posible también trabajar en el lounge, bar o cafetería.
Itália
En las grandes ciudades italianas, como Roma y Milán, siempre existe una gran posibilidad de encontrar una buena cafetería para trabajar o espacios de coworking como Famo Cose o Arco. Ya en ciudades pequeñas, eso es más inusual. La observación es de la profesional Tatiana Bertucci, freelancer de Workana, que trabaja con creación de contenido.
«Es más raro encontrar a alguien con laptop trabajando en una plaza o una cafetería, porque en las ciudades más pequeñas la población generalmente usa más los espacios públicos para el ocio», explica. Sin embargo, la freelancer notó facilidad para trabajar en tierras italianas: «Es posible trabajar hasta en hostels; ¡y ya he visto espacios de coworking en estaciones de metro!«.
Los Angeles, Estados Unidos
El estado estadounidense de California es otro lugar ideal para quien quiere vivir la vida nómada y trabajando de forma independiente.
La ciudad de Los Ángeles, por ejemplo, ofrece diversas oportunidades culturales y de entretenimiento; además de una enorme cantidad de espacios de conectividad al aire libre.
Un buen ejemplo es el Griffith Observatory, con red wi-fi gratuita y una vista increíble de la ciudad.
También es posible aprovechar la óptima conexión en el parque público Pershing Square, utilizando internet de alta velocidad.
Dinamarca
En «El Secreto de Dinamarca» (LeYa, 2016) la periodista Helen Russel cuenta cómo ha sido su experiencia como freelancer en el «país más feliz del mundo» y como ha sido su primer año en búsqueda del secreto de esa felicidad.
Entre las cosas que ha descubierto, está el hecho de que la cultura danesa prioriza la diversión y el bienestar. A los daneses – famosos por los juguetes Lego – les gusta su trabajo, pero no lo entienden como prioridad de vida, sino como complemento.
Es común que ellos hagan horarios flexibles incluso en empresas, saliendo más temprano para aprovechar tiempo con la familia, sin que eso obstaculice su rendimiento.
Como freelancers, sabemos que el equilibrio entre la vida personal y los trabajos es algo que necesitamos tomar en serio. Después de todo, apostamos en el trabajo remoto como una manera de tener más calidad de vida. Entonces un país cuya cultura sigue el mismo pensamiento es una gran elección para freelancers.
Algunos espacios en la capital de Copenhague: Café Dyreheaven, con wi-fi y delicioso menú; RiccosKaffebar, con espacio para reuniones y trabajo; y el DemocraticCoffee, en el corazón de la Biblioteca Central de Copenhague.
Helsinki, Finlandia
Luego de mudarse a Helsinki, el director de arte y productor musical Bruno Leo Ribeiro ha trabajado durante cinco años en una misma agencia. Sin embargo, después de ese tiempo, ha pasado seis meses trabajando como freela en la helada capital finlandesa.
A pesar de notar que la cultura de trabajo remoto allá no es muy grande, hay muchas cafeterías y bibliotecas con buena Internet (como Pasila Library), en los que es posible trabajar si quieres respirar nuevos aires mientras produces. Hay algunos espacios gratuitos abiertos de coworking y también hay pagos, como en el caso del UMA.
El productor también añade que «Helsinki es extremadamente acogedora para quien quiere trabajar como freelancer». La única dificultad para trabajar con locales puede ser el idioma, ya que «muchos clientes de aquí prefieren trabajar con nativos.»
Sin embargo, para los freelancers que trabajan vía plataformas como Workana eso no es impedimento – ya que tu cliente puede estar en cualquier lugar del mundo!
Paris, Francia
Está claro que la ciudad-luz no podría quedarse fuera de nuestra lista. Así como Hemingway se sentaba en una mesita del Café de Flore para escribir reportajes esporádicos y boletines de guerra, además de esbozar algunas novelas románticas, son muchos los profesionales que eligen la capital francesa para trabajar remotamente.
Entre las principales cafeterías work-friendly están el Anticafé, el Café Lomi, e Lyriquey el Craft (cuyo diseño moderno y tecnológico es óptimo para quien escoge el lugar para utilizar su laptop!).
Hong Kong, China
Clasificada como una «meca para trabajadores remotos» por SkillCrush, Hong Kong es una metrópoli ultramoderna y de punta. Ofreciendo mucha facilidad para freelancers, la ciudad china tiene diversas opciones naturales y bellísimas, además de la culinaria exótica.
En Victoria Peak es posible disfrutar de la increíble vista de 1.818 metros sobre el nivel del mar y el óptimo wi-fi.
Internet, por cierto, es lo que no falta en Hong Kong: ¡hay aproximadamente 15.000 hotspots en parques, plazas, bibliotecas y edificios públicos!
Buenos Aires, Argentina
Además de ser relativamente barato vivir en Argentina, la capital Buenos Aires es uno de los lugares ideales para los freelancers. Hay muchos espacios de coworking con salas (WeWork, por ejemplo!), oficinas y lounges. Además de cafeterías, como LAB, en Palermo.
Sin mencionar que Buenos Aires es culturalmente rica en cursos, librerías, bibliotecas (es allí que se encuentra la LINDA El Ateneo) y mucho network. O sea: además de ser un gran lugar para trabajar, también es increíble para desarrollarse como persona y profesional.
Buenos Aires es también cuna de Workana, que ha juntado talentos de América Latina y del mundo en una misma plataforma, en la que cliente y profesional se encuentran.
¿Y tú? ¿Tienes alguna sugerencia de un rincón en el mundo perfecto para la vida freela? ¡Deja tu comentario compartiendo tus experiencias en todo el mundo!
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