Etiqueta profesional freelance: ¿Cómo te comportas en las redes sociales?

El trabajo independiente es cada vez más común porque cada vez más personas utilizan las ventajas de Internet para trabajar desde casa, tener horarios más flexibles y desempeñarse en lo que realmente les gusta!

Y por supuesto, debido a que trabajamos remotamente, usamos Internet prácticamente todo el tiempo. Incluso a partir de ahí conseguimos proyectos para trabajar, como Workana, que es una plataforma de trabajo en línea independiente y remota.

También buscamos ayuda en algunas redes sociales, como en grupos de Facebook, Linkedin, perfiles de Instagram o incluso a través de plataformas conversacionales como WhatsApp. Con toda esta interacción, ¿alguna vez has parado a pensar cómo es tu comportamiento personal y profesional respecto las redes sociales?

Y como trabajadores independientes, ¿donde quedan las cuestiones de etiqueta y de ética online? Cuando entramos en una empresa para trabajar de forma presencial, como empleados fijos, es muy común que firmemos un documento de conducta en el trabajo. Pero, ¿qué pasa cuando somos trabajadores independientes? ¿Quién nos dicta estas reglas?

¿Vale todo o es necesario considerar nuestro comportamiento respecto a lo que decimos, cómo nos exponemos, cómo interactuamos e incluso si damos like a una publicación u otra? Este es un tema polémico y controvertido, pero creo que vale la pena hablar sobre ello.

¿Internet es tierra de nadie?

Fijate en estos datos: 

No tenemos por donde huir, las redes sociales ya forman parte de nuestro día a día y a su vez exponen nuestra vida personal y profesional de una manera única. Puedo asegurarte de que nunca existió algo parecido anteriormente. 

Las redes sociales interfieren directamente en nuestras vidas, a través de 3 perspectivas: la personal (como individuo), la profesional (como empleado o emprendedor individual/profesional Freelancer) y la marca (como organización). ¡Realmente, no hay escapatoria! 

Es necesario entender que al exponernos de una manera poco ética o poco correcta, podemos llegar a pagar un precio que a veces es demasiado alto. Tienes que saber combinar el sentido común con un comportamiento educado.

Recientemente, han viralizado en las redes sociales algunos casos interesantes.

Uno de los casos es el de una joven que se quejó públicamente, a través de su cuenta de Twitter, de que estaba en pleno sábado trabajando en algo que detestaba. Sin que ella lo esperase, el contratante lo vio, respondió a la publicación y el resultado fue la desconexión de la joven del proyecto.

El año pasado, un empleado de una de las mayores aerolíneas de América Latina, también perdió su trabajo al publicar un video en el que bromeaba con algunas mujeres durante la Copa de Rusia 2018.  

Y por último, pero no menos importante, ¿viste lo que le pasó a la chica que consiguió un contrato como pasante en la NASA y al celebrarlo en las redes sociales, insultó al consejero a través de Twitter? Por supuesto que perdió su pasantía…

Por lo tanto, una buena etiqueta profesional es esencial, no sólo para empleados fijos o en prácticas, sino que también es fundamental para los profesionales freelance, después de todo: ¿quién es el emprendedor que va a confiar en un profesional que tenga un comportamiento cuestionable en las redes sociales?

No sirve de nada ser un gran profesional y tener buena formación académica, si este se expresa inapropiadamente en las redes sociales. Y si crees que esto no afecta tu vida como freelancer: ¡estás muy equivocado! 

Así como existen reglas de etiqueta en una cena, el mercado laboral también tiene reglas de comportamiento que ayudan a dar flujo a las actividades.

Al contratar a un profesional freelance, el emprendedor quiere encontrar su pareja perfecta para el trabajo. Es decir, una relación duradera, de manera que para él sea fácil asignar tareas a un profesional, siempre que sea necesario.  Y ten en cuenta que estos contratantes buscan referencias personales del profesional a través de las redes sociales. 

Los buenos hábitos profesionales son muy valorizados, tanto en el momento de la contratación, como en el momento de decidir si la relación será corta o duradera.

Por eso es importante hablar de etiqueta profesional en las redes sociales.

Consejos de etiqueta para tu vida online

Nuestra capacidad de interactuar positivamente con los demás, compartir cosas interesantes y útiles y actuar de manera democrática en grupos demuestra la capacidad que un profesional tiene para desarrollar relaciones eficaces.

Los principales tipos de contenido que alejaran a los contratantes no te sorprenderán: fotografías o videos inapropiados, comentarios discriminatorios, hablar mal de una empresa anterior o de la actual, de un proveedor de servicios, un compañero de trabajo, o incluso demostrar poca capacidad de comunicación.  

Como mencioné anteriormente, las redes sociales afectan directamente a nuestras vidas personales y profesionales. No importa si eres un empleado fijo o un freelancer. Debes reconsiderar tu vida online y pensar si hay algo que impacta negativamente a tus relaciones profesionales. Siempre debes consultar la política de uso y privacidad de las empresas a las que prestas servicios. 

Aquí en Workana no es diferente, también tenemos políticas exclusivas de uso, de privacidad, términos y condiciones. Puedes revisar todas ellas en nuestro Centro de ayuda.

Antes de publicar o comentar en una red personal, piensa:

  • ¿Estoy desahogándome o quejándome? Desahogarse pueden parecer bueno, pero… ¡publicar un desahogo no te ayudará en absoluto! ¡Todo lo contrário! Te expondrás y a menudo expondrás a los demás. Tampoco publiques comentarios negativos o chismes.
  • ¿Le preguntaste la persona antes de marcarla? Cierta situación puede ser interesante para ti, pero tus amigos, familiares o empleador pueden pensar diferente. Compruébalo antes de etiquetar a alguna persona en tus publicaciones.
  • ¿Leíste todo el artículo antes de comentar o compartirlo? No colabores con las fake news. Tampoco saques conclusiones precipitadas de una noticia fijándote sólo en el titular.
  • ¿Es éste el camino correcto para el mensaje? No todo debe ser dicho en las redes sociales. Considera los sentimientos de la otra persona. Algunos mensajes deben ser dados en persona, por teléfono o por correo electrónico.
  • ¿He iniciado sesión en la cuenta correcta? Hay muchos ejemplos corporativos de publicaciones embarazosas que se han publicado en cuentas oficiales de algunas marcas. Comprueba siempre en qué cuenta has iniciado sesión (esto, principalmente para aquellos que trabajan como Community Manager). No publiques informaciones personales en las cuentas de las marcas que administres.
  • ¿Mi publicación cumple con las Políticas de Redes Sociales? La mayoría de las organizaciones tienen políticas oficiales sobre el uso de las redes sociales de las que probablemente te informaron en el momento de la contratación. No asumas que ya sabes lo que esta política dice. Muchos empleados fueron despedidos por no seguir las reglas de la compañía. Asegúrate de conocer y seguir los requisitos del empleador o del cliente.
  • ¿Mi publicación perjudica la reputación de mi empresa? No importa cuántas exenciones de responsabilidad introduzcas en tus cuentas, como por ejemplo «las vistas son mías», cierto contenido y comportamiento afectarán negativamente a tu empleador. Si en tu biografía explicas dónde trabajas, tu cuenta personal representa a tu empleador.
  • ¿Esto ayuda o perjudica al marketing de mi empresa? 
  • ¿Mi jefe/cliente estaría feliz de ver este post? Es posible que no tengas una relación cercana con tu jefe o cliente, pero un compañero de trabajo puede tenerla y tu publicación puede ser compartida o aparecer en una captura de pantalla. Incluso las cuentas privadas nunca son completamente privadas.
  • ¿Estoy siendo justo y correcto? Todo el mundo tiene derecho a tener una opinión personal, pero si su opinión tiende a ser siempre infundada, ella recaerá negativamente sobre ti.
  • ¿Estoy siendo respetuoso y no malintencionado? La gente puede sentirse ofendida por una crítica e incluso irritada por ciertos posts publicados. Eso no transmite una imagen profesional. No publiques lo que no dirías en persona. Es importante recordar: una publicación maliciosa estará ahí para siempre.
  • ¿Respeta la propiedad intelectual? No todo en Internet es gratuito. Comprueba u obtenga permiso para publicar materiales y contenido de la marca de la empresa o cliente.
  • ¿Esta información es confidencial? Como empleado o contratado, tendrás acceso a información privilegiada y confidencial. No presumas que es positivo compartirlo. No divulgues informaciones de la empresa o del cliente que no sean públicas.

¡Consideraciones finales!

Hemos visto que el mundo actual es online y que estamos rodeados por redes sociales. Mantener una vida social activa significa mantenerse en contacto con otras personas en Facebook, Linkedin, Instagram o Twitter. 

Incluso puedes tratar de no socializar con las personas con las que tienes una relación apenas profesional. Pero fijate, si un cliente comienza a seguirte en tu blog personal no hay mucho que se pueda hacer para evitarlo. Una solicitud de amistad enviada a través de Facebook o Instagram es igualmente difícil de rechazar cuando el que te la envió es la persona que está pagando por tus servicios de una manera regular.

Una opción que encontré fue reducir mi tiempo online, navegar, comentar y compartir contenido ameno y cosas que no aportan mucho a mi vida personal y profesional. Entiendo que si mis clientes me ven pasando mucho tiempo en Facebook, también pueden tener la sensación de que estoy perdiendo el tiempo y no trabajando en sus proyectos. Finalmente: ¡este nuevo posicionamiento fue perfecto! Me trajo más productividad y concentración. 

En este momento, utilizo LinkedIn más a menudo, ya que es un buen lugar para comunicarse profesionalmente y ampliar mi capacidad profesional. LinkedIn también da a los freelancers acceso a varios grupos y foros. Estos pueden ayudarte a ampliar tus conocimientos a través de los temas que se abordan y debaten.

Aquí en Workana, estamos utilizando esta red para compartir algunas oportunidades:

Además, cuanto más activo esté el freelancer en este tipo de grupos, más probable es aprender y crecer con los otros,  y que los clientes potenciales lo perciban. El freelancer que busca tendencias actuales gana puntos, eleva su reputación al estar a la vanguardia. 

El uso de las redes sociales sin precaución puede desmoronar tu carrera como freelancer. Toma las decisiones correctas y un cliente puede ser tuyo de por vida. Toma las decisiones equivocadas, y pasarás la eternidad buscando clientes día tras día.

 

Consultora de Marketing y Redactora. Apasionada por el Marketing dDigital, nuevas tendencias y tecnologías online.

Subscribe to the Workana newsletter and keep updated