Empezar como freelancer no es nada fácil. Nadie te conoce y lo más seguro es que ni siquiera sepas dónde encontrar clientes potenciales. De inicio eso puede ser muy desalentador.
De hecho, cuando yo me registré en Workana hace tres años, sabía que quería trabajar como redactor freelancer, y que quería dejar de trabajar en ambientes corporativos, nada más.
No tenía ninguna clase de experiencia en redacción comercial, no tenía idea de lo que necesitaban los clientes y ni siquiera podía dar una definición congruente de términos clave como “marketing de contenidos” “inbound” o “lead magnet”.
Mis únicas armas eran una ortografía impecable y una redacción limpia. Todo lo demás lo fui aprendiendo en el camino.
Hoy acepto proyectos bastante complejos de marketing digital, doy consultorías especializadas y soy la encargada de la redacción de más una decena de blogs corporativos, además de ser orgullosa colaboradora en el blog de Workana.
Si alguien me preguntara cómo lo logré, en primer lugar le diría lo evidente: con trabajo duro y una buena pizca de terquedad. Pero ese no es el único secreto del éxito; hay muchos profesionales talentosos y comprometidos que no logran conseguir suficientes clientes por cuenta propia.
¿Por qué? Pues porque no hacen el marketing personal adecuado.
En este artículo voy a contarles cómo me las ingenié para promocionar mis habilidades y conseguir mis primeros clientes. Luego, en una segunda parte (que publicaremos muy pronto) profundizaremos en estrategias de personal marketing enfocadas a freelancers con más experiencia.
Sin importar si vas comenzando o ya tienes tiempo en esto, considera todos los consejos que te doy, estoy segura que te serán de gran ayuda.
¿Cómo promocionar tu trabajo cuando empiezas como freelancer?
Cuando me di de alta en Workana, la plataforma contaba con poco más de 500,000 usuarios registrados y estaba en pleno crecimiento. Los primeros cuatro meses no logré conseguir un solo proyecto pese a que mandaba todas las propuestas que podía.
Pero yo estaba bastante decidida, y mediante prueba y error encontré una serie de estrategias que me ayudaron a ganar, finalmente,mi primer proyecto. En sólo tres meses ya había ganado suficientes como para renunciar a mi empleo fijo y dedicarme al 100% a la redacción freelance.
Te recomiendo que tú también sigas estas siete tácticas para agilizar tu arranque como freelancer:
1.- Optimiza tu perfil
Un error que veo con mucha frecuencia entre los usuarios nuevos de Workana es que, básicamente, pegan su CV en su perfil y esperan atraer clientes simplemente con un listado de las empresas en las que han trabajado.
La realidad es que a los clientes que buscan freelancers no les interesa leer una hoja de vida kilométrica. Ellos quieren comprobar habilidades concretas y ver una gran disposición para el trabajo bien hecho. Pero cuando todavía no tienes reviews de proyectos es bastante difícil ganarte su confianza.
Al inicio, literalmente dependes de lo que digas sobre ti en tu perfil. Y cada palabra cuenta: necesitas una introducción poderosa que vaya directamente al grano y retenga la atención de tu cliente potencial, así como un listado de habilidades que proyecte exactamente lo que sabes hacer.
Por ejemplo, yo al inicio, solo puse como habilidades “ortografía”, “redacción” y “corrección de textos”, y mi descripción decía algo similar a esto:
«¡Hola! Soy Assul, psicóloga de profesión y amante de las letras. Estoy buscando la oportunidad de demostrar la calidad de mi trabajo y comenzar a ganar reputación como freelancer. Lo que te ofrezco es una ortografía impecable, un estilo de redacción fresco y persuasivo y una disposición ilimitada de aprender. Si buscas una colaboradora de confianza para iniciar con proyectos sencillos de escritura y edición, te aseguro que soy una excelente alternativa.»
Hoy mi perfil es muy distinto porque ha ido evolucionando junto con las habilidades que he aprendido en el camino. Pero ser honesta y contundente fue definitivamente un elemento fundamental que hizo que mi primer cliente me diera el proyecto.
Recuerda que para poder mandar propuestas en Workana, tu perfil debe estar completo al 100%. La plataforma también cuenta con un centro de certificación de habilidades freelance gratuito. Aprovéchalas para certificarte en tu área de expertise y contar con un respaldo adicional de cara al cliente. No dejes de visitar este artículo con más consejos para construir tu perfil freelancer.
2.- Invierte en una membresía de Workana
Sí, sé que suena “vendedor”, pero te hablo desde la más absoluta honestidad. Los $4 USD que invertí en mi primer mes de membresía plus me sirvieron para poder mandar más propuestas, para certificar habilidades y para acceder al servicio de chat con clientes potenciales, lo cual es muy útil para agilizar la comunicación.
De hecho, gané mi primer proyecto poco después de eso, porque las 20 propuestas adicionales por semana me permitieron inclinar la balanza estadística a mi favor. Creo que igual hubiera terminado ganando proyectos tarde o temprano sin la membresía, pero definitivamente habría tardado bastante más.
Siempre será tu decisión si quieres o no hacer esa inversión. Pero considera que se trata de menos dinero del que gastarías en dos cafés de Starbucks.
Hay membresías más completas, la professional y la Premium, pero esas yo las recomiendo para freelancers que ya tienen un poco más de trayectoria, y las mencionaremos en la segunda parte de este artículo.
3.- No tengas miedo
Que no domines a la perfección un tema en particular no debe ser impedimento para que igual ofertes en un proyecto que realmente te interesa y que implica habilidades que sí tienes. Lo importante es tener una capacidad permanente para aprender e investigar. Actualmente todo está en Internet.
No estoy diciendo que debemos inventarnos conocimientos que no tenemos de cara al cliente para ganar el proyecto. Lo que quiero decir es que si tienes la habilidad principal que se requiere (por ejemplo: redacción), las habilidades periféricas puedes irlas adquiriendo sobre la marcha (por ejemplo: redacción específica sobre algún tema). A mí me funcionó.
Recuerda ser completamente honesto a este respecto. Puedes decir algo como “Tengo mucho talento redactando y, aunque no tengo experiencia redactando sobre esto en específico, considero que es un tema que puedo investigar y aprender fácilmente”.
Es muy importante que tu cliente siempre esté al tanto si hay alguna parte del proyecto que no conoces a la perfección, para que te brinde el tiempo suficiente para conocer el tema y puedas ofrecerle la solución que necesita.
4.- ¡Tus contactos tienen que valer en serio!
Por otro lado, también es muy importante que cuides tus contactos para que siempre sean profesionales y viables. En Workana, puedes entrar en contacto con un cliente nuevo mediante la propuesta o consulta que mandas a su proyecto. Recuerda que según el plan que tengas, tienes cierto número de contactos disponibles a la semana, por lo que debes aprovecharlos al máximo.
Cuando renuncié a mi empleo formal para convertirme en freelancer de tiempo completo, la preocupación de tener suficiente trabajo me llevó a ofertar de forma irresponsable a proyectos para los que no tenía ni las herramientas ni la experiencia adecuada.
Uno de ellos terminó por concretarse y aunque al final entregué todo en tiempo y forma, hacerlo implicó un gasto de energía mental y emocional que no se compensaba en absoluto con el pago.
Evita postularte a proyectos que definitivamente no están entre tus áreas de especialidad o que exceden tus capacidades actuales, porque en el mejor de los casos harás perder tiempo al cliente, y en el peor podrías terminar con una penalización o con una mala calificación.
5.- Lleva registro de todo
Después de contactar con todos los clientes que viste interesantes, por fin lograste ganar tu primer proyecto. ¡Felicidades! No importa qué tan pequeño sea: asegúrate de guardar una captura de cada etapa del proyecto para empezar a armar tu portafolio freelance.
Yo cometí el error de comenzar a mandar entregas sin guardar evidencia del trabajo que estaba realizando, y luego ya no encontraba las URL´s, o las daban de baja y no tenía forma de usarlas para demostrar la calidad de mi redacción con proyectos concretados.
Pronto me di cuenta que cuando tu perfil le interesa a un cliente lo primero que te pregunta es: «¿tienes ejemplos de tu trabajo que podamos ver?”. Obviamente después de eso comencé a llevar registro de todo.
Con el tiempo, tuve suficientes ejemplos como para armar presentaciones enfocadas a las necesidades del cliente, lo que aumentó de forma drásticas mis probabilidades de quedarme con proyectos.
6.- Busca un sensei
Uno de mis primeros clientes fue un redactor con bastante experiencia en el área comercial y cuya cantidad de proyectos ya estaba rebasando su capacidad de trabajo. Así que decidió apoyarse con redactores novatos como yo: a cambio de un precio preferencial que le permitiera quedarse con una módica comisión, él siempre me tenía trabajo y me compartió bastante conocimiento y recursos de gran relevancia.
Realmente no es mala idea que busques a alguien con más experiencia con quien puedas aprender mientras sigues creciendo. Sólo cuídate de que efectivamente sea una relación laboral justa que beneficie a ambos.
7.- Fomenta relaciones a largo plazo con los clientes
Concretar un proyecto con cinco estrellas es muy satisfactorio, pero aún más satisfactorio es que el mismo cliente quede tan satisfecho con tu trabajo que vuelva a buscarte una y otra vez.
Como freelancer, consigues relaciones a largo plazo:
- Entregando en tiempo y forma un trabajo de gran calidad.
- Cobrando un precio justo.
- Siendo flexible, comunicativo y atento.
- Dando siempre un “extra” que el cliente no se espere.
Por su parte, en Workana te ayudan a mantener relaciones de trabajo a largo plazo mediante su esquema de comisiones escalonadas, pues mientras más factures con un mismo cliente, menor será la comisión por proyecto para ambos.
Esto es una motivación bastante eficiente para que un cliente se mantenga contratándote, pues a la larga puede llegar a invertir tan solo el 5% de comisión y seguir disfrutando de todas las garantías de la plataforma, y también tú.
En conclusión…
Aunque el inicio nunca es sencillo, con las estrategias de autopromoción adecuadas y una gran disposición de aprender, comenzarás a abrir las puertas que necesitas para ir creando una buena reputación como freelancer y llegar cada vez a más clientes potenciales.
Cada mes se dan de alta en Workana más de 100,000 freelancers, y actualmente la plataforma está cerca de los dos millones de usuarios registrados, lo que demuestra sin lugar a dudas que el estilo de vida freelance ya es una realidad para muchos.
Te recomiendo mucho que leas estos artículos si quieres más consejos valiosos para comenzar gradualmente tu carrera como autónomo: