Para muchos es el gran enemigo de nuestros tiempos, el culpable de la baja productividad y el causante de que al terminar el día no hayamos llevado a cabo ni un tercio de las tareas que teníamos previstas. Te hablamos de procrastinar, la acción de ir posponiendo las tareas importantes y reemplazándolas por otras que nos producen mayor satisfacción, y en una época donde emprendedores y freelancers pueden elegir cuándo y desde dónde trabajar esto se ha convertido en un …